Diferencias entre edulcorantes: sucralosa, sacarina y estevia
Estos tres edulcorantes se encuentran entre los más populares y utilizados por las personas diabéticas o por las que quieren mantener una dieta equilibrada en calorías. Tanto la sucralosa, como la sacarina o la estevia no alteran los picos de glucosa en sangre y reducen considerablemente el aporte calórico respecto al azúcar.
¿Cuáles son las principales diferencias entre sucralosa, sacarina y estevia?
Suelen tener diferentes usos y grados de dulzura.
► La sucralosa nos aporta cero calorías ya que no es absorbida por nuestro organismo. Su poder edulcorante es aproximadamente 600 veces superior respecto al azúcar. A nuestro paladar le gusta la sucralosa porque su dulzor y duración de este en la boca es parecido al del azúcar. Nos la podemos encontrar como ingrediente en alimentos como frutas enlatadas, postres, lácteos, bebidas… pero también como edulcorante de mesa.
► La sacarina tal vez sea el edulcorante artificial de mesa más popular debido a que fue el primero que se fabricó. Su poder edulcorante es similar a la sucralosa y tampoco tiene calorías. Además de en la industria alimentaria, también es muy usada en la industria farmacéutica para mejorar el sabor de ciertos medicamentos.
► La estevia es posiblemente uno de los edulcorantes con mayor proyección de futuro. Su aporte calórico es nulo y su dulzor no llega ser tan potente como la sucralosa o sacarina. Aunque no es un producto natural, es un producto de origen natural. Su ligero sabor a “regaliz” puede ser un inconveniente a la hora de mezclarlo con ciertos alimentos para ello se han desarrollado combinaciones que minimizan esta inconveniencia.
Los edulcorantes artificiales cada vez están más presentes en nuestra alimentación y cada vez está más constatada su seguridad alimentaria. Las opciones de edulcoración van en aumento en un mercado dinámico y cambiante.
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